Hay abrazos que duelen, abrazos que curan, abrazos que alivian, abrazos que se necesitan… a mi me gustan los abrazos que vienen de la nada, sin pedir, sin avisar, y que después, muchas cosas se terminan quitando: el miedo, la tristeza, la soledad y la duda. Y luego todo vuelve a florecer.
Abracémonos entre nosotras.
No critiques, no te burles, no ofendas, no discrimines, no violentes, no ataques, no humilles, no juzgues, no excluyas a otras mujeres.
Las piezas están hechas a mano, por eso el tamaño y la distribución de las flores y los colores pueden variar en cada modelo.
El color real puede ser sutilmente diferente dependiendo de la resolución de la pantalla y la calidad de monitor que está utilizando.
19,99 €
Abrazo
Sauvage
Recuérdame
Lala